Nadie parece encontrarle explicación a la masiva concurrencia que despierta el Festival de la Cerveza Artesanal de Resistencia que organiza Cerveceros del Litoral.
“Cada festival que pasa, la gente nos sorprende para bien”, cuenta Stella Maris Lavia, actual presidenta de la asociación. “Creemos que es masivo porque es público y gratuito pero la gente consume, no es que solamente va a pasear. Vendimos más de 20 mil litros”, remarca.
Tanto fanatismo por la birra encierra este evento que el primer fin de semana de noviembre convocó a más de 50 mil personas. Todo un récord que superó las expectativas si se tiene en cuenta que por primera vez en seis ediciones se hizo durante dos días.
“Es una locura, nos llegan felicitaciones de otras agrupaciones cerveceras de distintas provincias. Es un fenómeno que no podemos explicar porque siempre nos desborda, nos excede y duplica las expectativas”, definió Stella, que está al frente de cerveza La Pinta.
Festival de Cerveceros del Litoral sexta edición
El Parque 2 de Febrero supo ser un cementerio hasta entrado el siglo XX y lleva como nombre la fecha alusiva a la llegada de los primeros pobladores de la capital chaqueña.
En ese imponente predio, una misma postal se repitió el fin de semana: grupos de amigxs y familias enteras llegaban cuando caía la tarde con sus sillones y reposeras, mantas, mates, juegos y juguetes para los más chicos para instalarse un buen rato, recorrer las distintas propuestas gastronómicas -chipá mbocá, un manjar-, stands de cervecerías y destilados.
La oferta fue aún mayor: la programación incluyó varieté circense, paseo de emprendedores, stand de tattoos y barberías locales para lookearse. La conducción de Bebe Contepomi, la presentación de Los Tipitos e Iván Noble y sus canciones de rock ya clásicas fueron cantadas por la multitud.
El origen de un fenómeno
En 2016, la asociación que reúne a microcervecerías y homebrewers de Chaco, Corrientes, Formosa, Misiones y norte de Santa Fe daba sus primeros pasos para visibilizar su pasión por la cultura cervecera de forma colectiva.
Sebastián Bravo, el primer presidente que tuvo CDL, recuerda el espíritu de camaradería del Festival de Somos Cerveceros que se hizo en Paraná en 2014. “Los cerveceros panza verde son un modelo de cómo juntarse para hacer cosas. Ellos son un ejemplo de camaradería cervecera y de cómo hacer de eso un trabajo. Tratamos de volcar lo que ellos hacían acá y creo que nos fue bien”, contó el brewmaster de cerveza El Perro haciendo referencia a la agrupación Cerveceros de Entre Ríos.
También en 2016, desde Cerveceros del Litoral organizaron un festival, con la idea de que sus familiares y amigos los acompañaran en su primer evento público. Esa experiencia no solo fue compartida por sus seres queridos y conocidos sino que también fueron parte 5 mil almas. Ese fue el origen de un fenómeno cada vez más grande, que no para de crecer y expandirse.
Nicolás Falco, brewmaster de Bonita y actual vicepresidente de Cerveceros del Litoral busca dar una respuesta que encuentra en el apoyo del sector público: “Si bien la pandemia fue un golpe bastante fuerte, en estos años hubo un desarrollo muy importante de las cervecerías de la región. Las distintas comisiones de la asociados vienen haciendo un laburo muy interesante y tenemos mucho apoyo del Estado, que nunca te pone trabas ni para producir ni comercializar, hay acompañamiento y siempre propició ámbitos de festivales y encuentros para vender y estar en contacto con el público”.
#EsCultura
En esta sexta edición, a pocas horas de terminar el evento, algunos stands cerveceros tuvieron que bajar la persiana antes de tiempo por haberse quedado sin stock. “Agotado”, se pudo leer en varias pizarras donde antes se informaban los estilos disponibles para degustar.
En los dos días que duró el evento se vendieron en total 21.760 litros de los estilos más variados, lo que ronda el promedio de 500 litros por cervecería.
Cerveceros del Litoral hoy tiene un centenar de socios y socias. Sin embargo, en 2012 los homebrewers de Resistencia se contaban con los dedos de una mano y en una década todo creció de forma exponencial, con la aparición de microcervecerías.
Jorge Jara, uno de los socios de cerveza El Perro, es protagonista de la movida en Chaco desde el minuto cero. Durante el evento, definió que “a partir de todos estos eventos y de hacer accesible la birra a cualquier persona que paseaba un fin de semana, vimos que hay mucho consumo de birras, la gente sabe de birra, sabe qué quiere tomar y qué no, sabe de estilos y elige”.
Desde su mirada de productor, Sebastián Bravo compartió que “se ve un disfrute muy grande en lo que hacen los cerveceros de Resistencia y de Corrientes”.
El festival de Cerveceros del Litoral tiene una mística única que atrae y contagia a miles de apasionados por la birra en cada edición. ¿Nos vemos en 2023? No te lo pierdas. La ciudad de las esculturas respira cultura cervecera.